Siempre me pregunto si seguirás leyéndome, si algún día recordaste la forma en la que siempre te he escrito y si despierto algo en tí. Me gusta soñar que sí.
Anoche soñé contigo, fue una pesadilla, te perdía de nuevo, lo recuerdo todo como si en algún momento hubieras vuelto, pero te vas o mejor dicho te alejo de mí de nuevo pero te prometo que esta vez no lo hice adrede. Solo quería tenerte cerca, que fueras feliz y a poder ser conmigo.
Sé que lo estoy haciendo mal porque tengo a alguien en mi vida que me quiere y que me ha hecho sentir muchísimo, pero creo que ha llegado el momento de no hacernos más daño. De decirle lo que siento y que no puedo llegar a sentir por él. Me duele muchísimo, y ahora lo hago con razón, lo siento por no haberla tenido la última vez que estuvimos juntos.
Recuerdo aquel libro subrayado con fluorescente amarillo, con esos posits pegados que tanto te gustaban y solo me hace falta una palabra, la de siempre, para romperme en pedazos otra vez. Ricitos.
Retumba en mis oídos deseando volver a escucharte decirlo, enana, poesía, ricitos. Era todo tan real, que no supe verlo. Cuando ahora tengo algo real a mi alrededor me doy cuenta de que sí quiero esto, pero contigo. No puedo pedirtelo, se que no tengo derecho ninguno, pero te seguiré esperando por si decides volver.
Siempre he sido muy soñadora, y tú lo sabes mejor que nadie. Soñaba con bailar delante de muchísima gente, que les gustara y aplaudieran fuerte, pero solo me importaba que una de todas esas personas estuviera conmigo allí. Tú. Soñaba con que aquel día aparecerías entre bambalinas, me dieras un beso y me dijeras que todo iba a ir bien, que soy tu bailarina. Verías aquel solo que tantas veces te he dedicado y nunca has visto, aquel para el que tanto había trabajado.
Sabías que era una despedida y me lo dijiste, no quise verlo, pero como me dijiste una vez, ahora que se que puedo vivir sin tí me he dado cuenta de que no quiero.
Te espero.
It doesn't expire.
No hay comentarios:
Publicar un comentario